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El pasado domingo 22 de abril se inauguró la visita pastoral del obispo
de Zamora al arciprestazgo de Sayago, tal como adelantamos unos días antes (ver
noticia).
Reproducimos a continuación la crónica enviada por Mª Ángeles Antolín, hermana
de Jesús Redentor.
Fariza, 24/04/12. A las 18,30 de este domingo, el obispo, D. Gregorio Martínez Sacristán, con la
celebración de una solemne Eucaristía en la ermita de Nuestra Señora de Gracia,
inauguró la visita pastoral al arciprestazgo de Sayago.
Desde antes de las 18 ya las
gentes de esta buena tierra empezaron a llegar de los distintos pueblos. Todos
teníamos una cita importante: participar en la Eucaristía presidida por obispo
de nuestra Diócesis para iniciar el recorrido por estas tierras a lo largo de
estos meses, en la visita pastoral a todos y cada uno de los pueblos que
conforman el arciprestazgo.
Durante la celebración cantamos
con el coro de Peñausende, que había preparado los cantos para la misma,
escuchamos la Palabra de Dios, que fue proclamada también por personas de
distintas parroquias y oramos por el éxito de la visita pastoral.
El obispo, en la homilía,
agradeció nuestra presencia y nos exhortó a permanecer fieles a la fe,
transmitida por los apóstoles, en su sucesor, el obispo; a ser fuertes en medio
de las dificultades. A no desanimarnos ni creer que estamos solos, pues cuando
el Señor está en medio de nosotros, no hay que tener miedo. Pues, dijo, ésta es
una tierra cimentada sobre roca, así debe de ser la fe de de todos nosotros,
recia, firme.
Nos dijo que tenía muchas ganas
de venir a Sayago, a conocernos, a escucharnos, a encontrarse con todos y cada
uno de los que vivimos aquí para saber de primera mano nuestras esperanzas,
inquietudes y dificultades.
También animó a los sacerdotes a
ser verdaderos pastores, a acompañar y permanecer junto a todos los que les han
sido confiados, a llevarles el mensaje de Jesús con alegría y entusiasmo, sin
perder el ánima, a pesar de las dificultades.
Terminó agradeciendo nuevamente la
numerosa asistencia venida de todos los pueblos en este querido templo dedicado
a la Virgen María y pidiéndole a ella que nos acompañara a lo largo de la
visita pastoral. Así pues, terminó la celebración de la Eucaristía con un canto
a la Virgen al que todos nos unimos con mucho fervor.
A la salida, el obispo saludó a las
distintas personas que se acercaron, entre ellos un grupo de niños, que habían
venido acompañados por sus padres y que esperaron con paciencia para saludar al
obispo.
Álbum fotográfico de la
celebración: http://bit.ly/IOaF6N
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